La Personería de Bogotá logró que las autoridades nacionales y distritales se pusieran de acuerdo con los indígenas embera y se levantara una protesta que llevaba cerca de una semana alrededor del centro de la ciudad.

El sábado en la noche los indígenas regresaron en buses a los albergues que las autoridades tienen dispuestos para ellos y recibieron unos mercados más significativos de ayuda que los que habían recibido.

Los embera solicitaban que los pusieran en un solo albergue a todas las cerca de 300 personas, pero las autoridades explicaron que en estos momentos era imposible. Entre tanto surgió el compromiso de escuchar otras de sus demandas. Para ello se empezarán a reunir mañana con algunos de sus líderes.