• Bogotá es una de las principales ciudades receptoras de víctimas del conflicto armado.
• Evocamos los 30 años en que la Asamblea General de las Naciones Unidas, proclamó la Declaración sobre la protección de las personas contra las desapariciones forzadas.

Bogotá D.C., 30 de agosto de 2022 @PersoneriaBta. En el marco de la conmemoración Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada la Personería de Bogotá invita a reflexionar sobre las consecuencias que trae consigo este flagelo en Colombia, sumándonos en apoyo para visibilizar este delito y no olvidar a las víctimas.

“La desaparición forzada ha causado impactos no solo en las víctimas directas y en sus familias, sino en las comunidades y en la sociedad en general que ha tenido pérdidas inconmensurables en su potencial y desarrollo. Los sentimientos de confusión, impotencia, incertidumbre, miedo, indefensión y vulnerabilidad inundan la vida de quienes son víctimas de desaparición forzada”, afirmó el Personero de Bogotá, Julián Pinilla Malagón.

El fenómeno de la desaparición forzada, infortunadamente, no es un evento reciente en Colombia y ha estado inmerso en las dinámicas del país en el desarrollo del conflicto armado interno por más de 60 años.

En cuanto al número de víctimas, las cifras no son claras. La Red Nacional de Información de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, con corte al 30 de junio de 2022, señala que existen 50,704 víctimas directas de desaparición forzada y 138.738 víctimas indirectas. Por su parte el Centro Nacional de Memoria Histórica habla de 60.630 víctimas y la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas reporta a la fecha de 99.235 personas.

Para conmemorar esta fecha un grupo de funcionarios/as de la entidad visitó diferentes Centros de Encuentro para la Paz y la Integración Local en la ciudad, generando espacios de sensibilización a partir de la lectura de un caso real tomado del volumen testimonial del Informe Final de la Comisión de la Verdad, que relata los efectos devastadores que este flagelo tiene en las familias, las comunidades y la sociedad en general.

Como Personería de Bogotá, guardianes de los derechos, apoyamos a todas las víctimas que llegan a la capital, somos la principal ciudad del país en albergarles y solicitamos a las autoridades que continúen desarrollando políticas, planes y programas incluyentes para evitar que el fenómeno siga creciendo, invitando a “visibilizar para no olvidar” hoy y todos los días.