• El relleno sanitario está operando sin contar con un permiso de vertimientos vigente.
• Está enterrando material reciclable y dispuso basura en sector no autorizado.
• Ante los incumplimientos del concesionario, no se ven acciones contundentes del Distrito para remediarlos.
La Personería de Bogotá determinó que el Relleno Doña Juana continúa vertiendo lixiviados sin permiso alguno, está enterrando grandes cantidades de material reciclable y estuvo disponiendo basura durante varios meses en un sector no autorizado, sin que las medidas tomadas por el Distrito, garantizaran la operación del relleno respetando las normas.
El relleno funciona sin contar con un permiso de vertimientos de lixiviados vigente, infringiendo las normas ambientales, toda vez que no cuenta con el debido consentimiento de la autoridad ambiental. Incluso, actualmente se encuentra incumpliendo los plazos otorgados por el Tribunal de Arbitramento para realizar la optimización del sistema de tratamiento que garantizaría la gestión adecuada de todos los contaminantes que se generan en el lugar y que impactan el río Tunjuelo.
Eso no es todo, la Personería Distrital en visitas conjuntas con la Procuraduría General de la Nación al relleno evidenció que se están enterrando grandes cantidades de material reciclable, debidamente separado, lo que impacta la vida útil de este lugar y no genera beneficios para los recicladores, quienes están amparados por la Corte Constitucional desde el año 2003 por la Sentencia T-724 y sus respectivos autos.
Durante meses se realizó la disposición de residuos en una zona no licenciada, frente a lo cual la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) informó que se debe a una medida técnica tomada por el Concesionario CGR, a raíz de una sanción, situación que no justifica la disposición irregular de los desechos.
Además, el Ministerio Público Distrital evidenció que el concesionario no ha cumplido con algunas de las órdenes impartidas por el Tribunal de Arbitramento, en los plazos otorgados, es el caso de la presentación del informe de las inversiones de gestión social de los años 2012 a 2016, así como la instalación y conexión de los instrumentos de geotecnia para la automatización del relleno.
En una carta de la personera de Bogotá, Carmen Teresa Castañeda Villamizar a la dirección de la UAESP, expresa que le preocupa que el concesionario siga haciendo
uso de su autonomía técnica, en contravía de la normatividad vigente y sin el aval de la autoridad ambiental en la operación del relleno, sin que el Distrito tome las medidas que garanticen su cumplimiento.
Después de 4 veedurías, decenas de visitas técnicas y administrativas en los últimos años y múltiples reuniones en una mesa de trabajo iniciada en noviembre de 2018 con la comunidad y las autoridades, el Distrito sigue permitiendo que el concesionario haga caso omiso a las obligaciones que tiene de operar el relleno atendiendo las normas y respetando el derecho a un ambiente sano para los capitalinos, especialmente de los habitantes del sector.