• Los Guardianes de tus Derechos han verificado el respeto de los DDHH de las personas privadas de la libertad durante todo el año 2021.
• La Personería recibe requerimientos individuales y grupales de la población privada de la libertad, y verifica de manera presencial la operación de las áreas de sanidad, servicio de alimentos, condiciones de celdas y espacios comunes como aulas y lugares de trabajo.
• Personero pide acciones para solucionar esta problemática y anuncia más controles en el 2022.
*Bogotá, D.C., diciembre 27 del 2021 (@PersoneriaBta).* La Personería de Bogotá durante todo el año estuvo presente en Centros Penitenciarios, Cárceles, Estaciones de Policia y URIs, como garantes de los derechos de los detenidos, sentenciados e imputados, por esto advierte que no se respetan los Derechos Humanos a las personas privadas de la libertad.

“Seguiremos realizando un seguimiento a los derechos humanos no solo al interior de las penitencierias sino también en el proceso de visita de sus familias”, afirmó el Personero de Bogotá, Julián Pinilla Malagón.

El Ministerio Público Distrital mantuvo la participación en Consejos de Disciplina, Comité de Derechos Humanos y recepción de requerimientos ciudadanos a través de familiares y redes de apoyo de la población privada de la libertad, durante el periodo de cuarentena por la Pandemia, tambien se reiniciaron las visitas en el segundo semestre para la situación de las personas privadas de la libertad de manera presencial.

El Ente de Control Distrital ha realizado seguimiento especial a los siguientes temas: 1. Derecho al espacio digno; 2. Situación de derechos humanos de personas con orientaciones sexuales e identidades de género diversas privadas de la libertad; 3. Requerimientos ciudadanos de personas privadas de la libertad en cárceles y penitenciarías.

Espacio digno.
El problema de hacinamiento y, en general, el estado de cosas inconstitucional es notorio de manera especial en los centros penitenciarios y carcelarios a cargo del INPEC y en los centros de detención transitoria, esto es, las Unidades de Reacción Inmediata (URI) y las estaciones de Policía.

La Personería de Bogotá ha remitido derechos de petición a los establecimientos penitenciarios y carcelarios, quienes atribuyen un descenso de la población carcelaria a que se ordenó sustituir pena de prisión y medida de aseguramiento por medidas de prisión y detención domiciliaria, bajo determinadas circunstancias, como estrategia para mitigar y prevenir el contagio de la Covid-19.

Sin embargo, organizaciones de derechos humanos y centros de pensamiento que hacen seguimiento a la política penitenciaria, señalan que la disminución en el hacinamiento durante la pandemia no debe ser vista como algo positivo ya que persiste el hacinamiento, que en el caso de las Estaciones de Policía en algunos casos ha llegado al 580% de ocupación.

Además, se debe tener en cuenta, la disminución en el número de capturas durante la pandemia; y el traslado a los centros transitorios de reclusión como las URI y estaciones de Policía, dadas las restricciones de entradas de detenidos a las penitenciarías y cárceles del país por motivo de la pandemia.

Es por esto que la situación de personas privadas de la libertad en estaciones de Policía que en el primer semestre 2021 se redujo a 136% por cierres parciales o totales de algunas estaciones.

A través de las visitas administrativas integrales la Personería, desde la Delegada para la Defensa y Protección de los Derechos Humanos recibía un mayor volumen de requerimientos individuales y grupales de la población privada de la libertad, al tiempo que verifica de manera directa aspectos clave en la garantía de derechos de la población: operación de las áreas de sanidad, servicio de alimentos, condiciones de celdas y espacios comunes como aulas y lugares de trabajo.

A medida que avance el plan de vacunación y la contención del virus se retomarán y fortalecerán las labores de seguimiento y acompañamiento. También un especial seguimiento al proceso de vacunación en los establecimientos carcelarios de Bogotá.

Respeto a orientaciones sexuales e identidades de genero diversas.
El enfoque diferencial reconoce que hay poblaciones con características particulares debido a su edad, sexo, religión, identidad, expresión de género, orientación sexual, diversidad corporal, raza, etnia, situación de discapacidad, entre otras.

Las medidas penitenciarias y carcelarias deben tiene consideración estas diferencias, adoptando medidas tendientes a prevenir situaciones de violencia, discriminación o exclusión en razón de la orientación sexual, identidad o expresión de género, así como promover, visibilizar y garantizar derechos.

Este Ministerio Público Distrital ha verificado el cumplimiento y respeto de espacios especiales para la población LGTBIQ+, requisas por personal del mismo género, uso de elementos y tratamientos de belleza, prendas de vestir propios de mujeres, respeto a atuedos y accesorios propios de la identidad de genero, jornadas especiales de salud y tramientos hormonales, y presencia de un representante en el Comité de Derechos Humanos, en el Complejo carcelario y penitenciario con alta, media y mínima seguridad La Picota, cárcel y penitencieria de mediana seguridad La Modelo y, Cárcel y penitencieria de alta y media seguridad para mujeres El Buen Pastor.

Requirimientos ciudadanos.
Las estadísticas de los requerimientos ciudadanos, a la Personería, en penitenciarias y cárceles evidencian que las mujeres, en su gran mayoría son quienes: más buscan información; más requieren la intervención, la orientación y participación de la delegada para la Defensa y Protección de los Derechos Humanos; más acuden en busca de protección de las personas privadas de la libertad y el respeto por los derechos humanos de estas.

Por otra parte, en los espacios de capacitación a la población carcelaria se ha evidenciado el empoderamiento de la población LGBTI, que sumado a su condición de sujetos de especial protección y el proceso de visibilización que adelantan, ha incidido en el aumento de sus requerimientos de respeto por sus derechos. El número de solicitudes de las personas jurídicas, organizaciones civiles y sociales, veedores ciudadanos penitenciarios de derechos humanos nacionales e internacionales mantiene igual porcentaje.

Debido a la pandemia y las continuas cuarentena en los patios, estructuras e inclusive el cierre de todo un establecimiento, se ha mantenido la barrera de acceso a la presentación de requerimientos grupales respecto a las personas privadas de la libertad, situación que imposibilita la oportunidad de brindarles mayor apoyo. No obstante, durante el segundo semestre se han reanudado las visitas administrativa, participación en comités de DDHH y las entrevistas individuales por parte de los agentes del ministerio público, en la que pueden verificar las condiciones de las personas privadas de la libertad, conforme a los requerimientos hechos por sus familiares o de los propios sujetos de especial protección.

Igualmente, el constante incumplimiento del contrato de suministro de alimentos por parte de consorcios y uniones temporales hizo que las personas privadas de la libertad se declararan en huelga de hambre, lo que llevó a convocar a las entidades responsables de la vigilancia y cumplimiento de los servicios de infraestructura, salud y alimentos. En dicha reunión se establecieron compromisos de mejora en el suministro de alimentos; la eliminación de las barreras de acceso a la salud y los medicamentos. Esta determinación redundará en mejor calidad en los tratamientos médicos y en menores tiempos de atención a los requerimientos de las personas privadas de la libertad.